Cada situación que se nos presenta es una oportunidad para la oración. La decisión en favor de Dios está siempre presente en nuestra mente. Esta decisión significa que no importa lo que se presente, o lo que suceda, nuestra decisión es profundizar en la Verdad. Ahora. Más allá de las cosas de este mundo.
Cuando nuestro deseo de Dios es todo lo que queremos, ya no tenemos miedo, porque no hay resultado que pueda salir mal.
Dios es la única Garantía, el único Resultado Garantizado.
Cuando Él es realmente el objetivo que busco, y el objetivo de toda mi vida aquí, no tengo nada que temer. Lo que busqué, lo encontré.
La meta está aquí y ahora, en mi corazón.
Cualquier otra «meta» lleva a mi mente a identificarse como un cuerpo, en el guion, en el futuro. Ese es un pensamiento aterrador. No importan los detalles. Simplemente, identificarse con la «persona», el «cuerpo», «en el guion» es un pensamiento aterrador, porque es identificarse con algo separado, algo aparte de Dios. Algo que puede ser amenazado.
Dios no está en el tiempo. Dios es Amor, aquí y ahora. Hay una igualdad detrás de todas las apariencias, un Amor más allá de todas las imágenes, una coherencia debajo de todos los acontecimientos.
En lo más profundo de nuestra mente, no hemos olvidado a nuestro Padre. Nuestra unidad con Él no se ve sacudida por las ilusiones. Siempre hemos permanecido en Su Amor eterno.
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«Te identificarás con lo que pienses que te ha de dar seguridad. Sea lo que sea, creerás que es lo que tú eres. Tu seguridad reside en la verdad, no en las mentiras. El amor es tu seguridad. El miedo no existe. Identifícate con el amor y estarás a salvo. Identifícate con el amor y estarás en tu morada. Identifícate con el amor y hallarás tu Ser». ~ ¿Qué es el cuerpo? UCDM E-pII.5
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«Padre, estás delante y detrás de mí, a mi lado, allí donde me veo a mí mismo y dondequiera que voy. Estás en todo lo que contemplo, en los sonidos que oigo y en cada mano que busca la mía. En Ti el tiempo desaparece y la idea de lugar se vuelve una creencia absurda. Pues lo que rodea a Tu Hijo y lo mantiene a salvo es el Amor Mismo. No hay otra fuente que Ésa y no hay nada que no comparta Su Santidad, nada que se encuentre aparte de Tu única Creación o que carezca del Amor que envuelve a todas las cosas dentro de Sí. Padre, Tu Hijo es como Tú. Hoy apelamos a Ti en Tu Propio Nombre para estar en paz dentro de Tu eterno Amor».
~ UCDM E-pII.264
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En profunda gratitud ❤️❤️❤️
Kirsten
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